En algunos aspectos los desembalses de Barasona (1995, 1996, 1997) podrían haber sido + controlados para reducir el impacto sobre el ecosistema fluvial. Pero en lo que se refiere a la gestión de las compuertas de fondo y de los sedimentos, desde los 90 hasta la actualidad, se trata de una experiencia que no se puede desestimar. Nos lo explica Julio Español, responsable de mantenimiento del embalse de Barasona.
Defender que los mecanismos de las presas se mantengan en buen estado y se usen regularmente (especialmente los sistemas de desagüe) significa defender la normativa vigente (de 1967 y de 1996), implica defender la seguridad de toda el área de influencia de la Cuenca del Ebro y posibilitar que los sedimentos puedan movilizarse (desde los embalses) por todos los cauces y llegar al Delta del Ebro para protegerlo. En este sentido, gestionando los sedimentos adecuadamente se evitaría que los embalses se colmaten por los sedimentos (quedando obsoletos) y, por lo tanto, se evitaría que se proyecten nuevos embalses, inundando mas pueblos, tierras y ecosistemas, que agravarían el cambio climático.
VER VIDEO: https://www.youtube.com/watch?v=C5wZ9-1dax4&t=61s
Campanya pels Sediments
Defender que los mecanismos de las presas se mantengan en buen estado y se usen regularmente (especialmente los sistemas de desagüe) significa defender la normativa vigente (de 1967 y de 1996), implica defender la seguridad de toda el área de influencia de la Cuenca del Ebro y posibilitar que los sedimentos puedan movilizarse (desde los embalses) por todos los cauces y llegar al Delta del Ebro para protegerlo. En este sentido, gestionando los sedimentos adecuadamente se evitaría que los embalses se colmaten por los sedimentos (quedando obsoletos) y, por lo tanto, se evitaría que se proyecten nuevos embalses, inundando mas pueblos, tierras y ecosistemas, que agravarían el cambio climático.
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